Recientemente, la Organización Mundial de las Naciones Unidas – ONU, reconoció a las cooperativas como impulsoras claves de emprendimiento social juvenil y desarrollo en su informe Informe Mundial sobre la Juventud: Emprendimiento social de los jóvenes y la Agenda 2030, presentado por Isabelle Legare, Oficial de Asuntos Sociales de la Unidad del Programa de Juventud del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de las Naciones Unidas (DESA). En el documento, se destaca el apoyo que representa el modelo solidario y cooperativo para los jóvenes emprendedores de todo el mundo.
El informe tiene como propósito analizar cómo los emprendimientos sociales ejecutados por jóvenes, contribuyen al cumplimiento de la agenda 2030, y busca examinar cómo este tipo de emprendimientos articulan la promoción de la laboralidad juvenil, actividades ambientales, la educación, la equidad, entre otros.
El tercer capítulo de este informe, evalúa el potencial y los desafíos del emprendimiento social juvenil, y pone al cooperativismo como actor esencial e impulsor de este tipo de emprendimientos, presentándolo como un modelo democrático, que ayuda a abordar los principales retos de la juventud de hoy, como el trabajo formal. También, el documento enfatiza en que las cooperativas facilitan el acceso al crédito y la mutualización de los jóvenes, así como la formalización de la economía informal.
Según el informe, “Las cooperativas también apoyan la participación de sus miembros en los asuntos políticos dándoles voz en la sociedad. Las personas a menudo son excluidas de los ejercicios y plataformas de formulación de políticas, el modelo cooperativo es de particular interés. A través del diálogo social, las cooperativas pueden promover principios como la democracia y la participación. Con su forma participativa de gobernanza, las cooperativas ofrecen a los jóvenes un “laboratorio” en el que pueden experimentar innovación y enfoques sostenibles para la gestión empresarial. Los marcos institucionales que regulan las cooperativas ofrecen a los jóvenes emprendedores sociales un ecosistema solidario en el que temas clave como el empleo de calidad, la estatus legal de los trabajadores-miembros, acceso a financiamiento y otras formas de apoyo, preocupaciones burocráticas y sociales y la sostenibilidad económica recibe la atención que merecen”, destaca.
El informe, expresa que las cooperativas son empresas centradas en personas, con bases sólidas hacia el desarrollo sostenible, lo cual se traduce en la suma de esfuerzos solidarios, que permiten, desde el cooperativismo, que miles de jóvenes alrededor del mundo puedan acceder a la vida laboral tradicional, sin mayor experiencia, lo cual impacta directamente el logro del los Objetivos de Desarrollo Sostenible 4 y 8, educación de calidad y trabajo decente. Una de las conclusiones a que llega el documento, es que el cooperativismo influye en la realización de proyectos sostenibles ambientales, económicos y sociales para los jóvenes.
El informe hace mención especial a la Alianza Cooperativa Internacional – ACI, mencionando que “representa a más de 3 millones de cooperativas y más de 1200 millones de miembros en todo el mundo, en todos los sectores de la economía”, así como al Foro Mundial de la Juventud sobre Emprendimiento Cooperativo (GYF20).
