La forma asociativa y empresarial solidaria fue la respuesta para miles de jóvenes sin recursos económicos suficientes, con deseos de acceder a la educación superior que Uniminuto no alcanzaba a financiar directamente, pues sus esfuerzos estaban enfocados principalmente en desarrollar con calidad las funciones sustantivas de su proyecto educativo: docencia, investigación y proyección social.
Han transcurrido 20 años durante los cuales se han otorgado y gestionado bajo formas y con productos innovadores, más de 983.240 créditos por un valor superior a 1.2 billones de pesos, que le permiten contar con más de 109 mil asociados al cierre de 2020.
Este modelo cooperativo permite a quienes se vinculan como asociados desempeñar sus funciones como copropietarios del capital colectivo que construyen conjuntamente, ser usuarios de servicios innovadores extendidos a otras 10 instituciones de educación superior coincidentes en la misión de la Obra Minuto de Dios, y actuar en diferentes escenarios como gestores de su propia organización.
Su amplia cobertura, con presencia en 22 departamentos, 56 municipios y 80 puntos de atención al cierre de 2020 le ha permitido extender y fortalecer el modelo cooperativo, como una oportunidad para materializar proyectos de vida de los jóvenes y contribuir positivamente al desarrollo de sus familias, comunidades y regiones.
Las historias de vida de miles de asociados que son parte o han estado vinculados a la Cooperativa y sus servicios le enorgullece: lograr un título universitario por primera vez en muchas familias; realizar pasantías en el exterior abriendo sus horizontes a otras culturas; acceder a equipos y tecnología para continuar desde sitios remotos su proceso educativo; construir exitosamente su historia financiera mediante el registro de su cultura de pago en centrales de información especializada; obtener en casos especiales auxilios y beneficios de los fondos de solidaridad, educación, financiación especial, becas y descuentos, especialmente durante el último año, que por la pandemia afectó a tantas personas y familias.
El compromiso, conocimiento y disponibilidad del talento humano presencial o bajo la modalidad de “Trabajo en Casa”, la digitalización y automatización de procesos, la certificación del Sistema de Gestión de Calidad -SGC por más de 10 años continuos, han permitido a la Cooperativa Minuto de Dios evolucionar y destacarse como una empresa eficiente, vanguardista y orientada a ofrecer beneficios sociales y servicios financieros integrales que facilitan el acceso y permanencia en la educación, el desarrollo socioeconómico y el bienestar de todos los que la integran.
Un reconocimiento especial merece la Corporación Universitaria Minuto de Dios, como aliada estratégica, promotora, proveedora y usuaria de nuestros servicios, partícipe en la gestión y direccionamiento estratégico, para desarrollo, crecimiento y proyección de la Cooperativa Minuto de Dios en los años por venir.
Las coincidencias misionales y la articulación con las otras empresas de la Obra Minuto de Dios -OMD comprometen a la Cooperativa en la “…organización de una nueva sociedad que se arraigue en el cristianismo y que, al mismo tiempo, aproveche todos los adelantos sociales humanos, constituyendo un campo de aplicación de las más avanzadas y ambiciosas doctrinas sociales católicas.”, como afirmaba el sacerdote Rafael García-Herreros.