Con motivo de esta importante celebración, Martín Fernández, director del Instituto Nacional del Cooperativismo – Inacoop, aseguró que el compromiso del gobierno uruguayo, durante la emergencia provocada por el Covid-19, es estrechar el vínculo con el movimiento, mediante educación, capacitaciones y asistencia técnica y crediticia, con el fin de que las cooperativas sean actores claves en la reactivación económica del país.
Fernández, quien compartió esta celebración con el ministro de Trabajo, Pablo Mieres, dijo que su propósito es “Potenciar esto a través de las herramientas del Inacoop, porque existe el compromiso claro del Gobierno de estar en este quinquenio cerca de las cooperativas y sostener a las que están pasando algunas dificultades”.
Mencionó además que el cooperativismo es quien potencia la formalización del trabajo, y que cuando se decretó el estado de emergencia en este país, el 13 de marzo, el 25% de los trabajadores uruguayos estaban en la informalidad, y que el cooperativismo puede emprender muchas acciones para solucionar esta problemática social y económica. “Tenemos más de 300 cooperativas sociales, algunas de ellas con más de 10 años, y, si miramos fríamente el contexto, ya no revisten la vulnerabilidad que tenían hace una década, por el trabajo estable que tienen. Hay que ver si pueden pasar a cooperativas de trabajo o producción autónomas”, explicó.
Entre las acciones que se han emprendido en conjunto, entre el sector cooperativo y el gobierno uruguayo, se ha coordinado que las cooperativas sociales que empezaron como entidades vulnerables, puedan trabajar de manera autónoma con apoyo del Ministerio de Desarrollo Social (Mides).
Es importante destacar que en Uruguay hay 3.600 cooperativas y 800.000 nacionales vinculados al sistema, que genera más de 25.000 puestos de trabajo directo, con presencia en todo el territorio.
