Febrero 21 de 2019. Las empresas deben entender que no se trata solo de un proceso tecnológico y de adquisición de los últimos equipos y de software, sino del desarrollo de habilidades específicas en su fuerza de trabajo que le permitan llevar el proceso a feliz puerto.
Fuente: El Espectador
Lejos de ser un término que haga referencia a complicadas tecnologías y a una serie de cambios que le conciernen a un grupo reducido de trabajadores dentro de las compañías, asociado comúnmente al departamento de TI, la transformación digital tiene que ver con un cambio cultural, con un nuevo mindset empresarial, con la capacidad de innovar, ser flexible al cambio, contar con un riesgo calculado y tener una disposición a fallar, todo en pro de evolucionar una organización, una industria e incluso un mercado.
¿Y esto cómo se traduce en el día a día de una compañía? En que en la actualidad los ciclos comerciales son mucho más cortos. Mientras al mundo le tomó 50 años apropiarse y llegar al punto máximo de la revolución industrial, hoy una empresa tiene seis meses para cambiar y asegurar su permanencia en el tiempo, redefinir procesos, sacar el mayor provecho de las herramientas tecnológicas que tiene a man